Empezamos el fin de semana y nosotros no descansamos (especialmente porque esto de compartir las ilustraciones me encanta). Traemos una alucinante ilustración de un guerrero saia, que aunque no le vemos el rostro, por la complexión nos hace pensar que pertenece a los humanos. Luciendo una fantástica armadura de placas y mallas llena de labrados y realmente hermosa. Blande dos preciosas espadas y lo mejor es la postura épica en la que se encuentra, con el sol a su espalda, sobre un montículo y con la capa al viento le dan un aspecto de lo más increíble. Ademas que a sus pies se desarrolla una cruenta batalla que hace de la escena una gran ilustración.
Una ilustración para el juego de rol de Aeria Gloris.